Con motivo de la fiesta de la "Visitación de María", el 31 de Mayo, colocamos las dos reflexiones que sobre ella trae el libro Intimidad Divina del Padre Gabriel de Santa María Magdalena.
LA VISITACION DE MARIA A ISABEL
1.- "En aquellos días se puso María en camino y con presteza fue a la montaña, a una ciudad de Judá", así leemos en el Evangelio de hoy (Lc. 1, 39-47). Con la fina delicadeza de su caridad, María siente profundamente las necesidades ajenas, de modo que, apenas las advierte, acude con presteza, espontánea y decidida a prestar su ayuda. Ha sabido por el ángel Gabriel que su prima Isabel está próxima a ser madre, y sin demora se pone en camino para ir a ofrecerle sus humildes servicios. Si consideramos las dificultades de los viajes en aquellos tiempos, cuando los pobres —como lo era María— o habían de caminar a pie por veredas penosas o, a lo más, podían valerse de alguna mísera cabalgadura que por acaso encontraban de camino, y que, además, la Virgen permaneció con Isabel tres meses, comprenderemos que, para practicar este acto de caridad, Nuestra Señora hubo de afrontar no pocas molestias. Pero no se preocupa en absoluto de ellas ; muévele la caridad, olvidada totalmente de sí, porque, como dice San Pablo, «la caridad no es egoísta)) (I Cor. 13, 5). Piensa cuántas veces, no para ahorrarte un viaje incómodo, sino única-mente para evitar una pequeña molestia, has omitido algún acto de caridad; piensa cuán tardo y perezoso eres en prestar ayuda a tus hermanos. ¡Contempla a María y mira cuánto tienes que aprender de ella!
La caridad hace a María olvidar no sólo sus propias molestias, sino hasta su dignidad, la más alta dignidad que jamás una pura criatura haya tenido. Isabel es anciana, pero María es Madre de Dios; Isabel está para dar a luz a un hombre, mientras María dará a luz al Hijo de Dios. Y, no obstante, María delante de su prima, como, delante del ángel, continúa considerándose humilde esclava del Señor y nada más. Y precisamente porque se considera esclava, se porta tal en la práctica, aun con relación al ¿No es verdad que, si bien sabes humillarte en la presencia de Dios, si bien sabes reconocerte imperfecto en lo secreto de tu corazón, agrada luego aparecer tal delante del prójimo y eres fácil en resentirte si alguno te trata en consecuencia? ¿No es verdad que te las arreglas para hacer valer tu dignidad, tu cultura tus habilidades, los oficios y cargos más o menos honrosos que te han sido confiados? Tu dignidad es nada, y con todo eres tan celoso de ella; la dignidad de María se roza con el infinito, y ella se considera y conduce como si fuese la última de todas las criaturas.
PUNTO SEGUNDO. — «...E Isabel, en voz alta, exclamó: Bendita Tú entre todas las mujeres y bendito el fruto de tu seno. Y ¿de dónde a mí que la Madre de mi Señor venga a mí?» Iluminada interiormente por el Espíritu Santo, Isabel reconoce en su joven prima a la Madre de Dios y, conmovida, prorrumpe en acentos de alabanza y admiración. María no protesta; escucha con sencillez, porque sabe muy bien que' esas palabras de encomio no le conciernen tanto a Ella cuanto al Omnipotente que en Ella ha obrado cosas grandes, y al punto, de su corazón humildísimo todas las alabanzas de Isabel rebotan a Dios con movimiento espontáneo y rapidísimo: Tú, Isabel, ensalzas a la Madre del Señor —dice la Virgen—, pero «mi alma ensalza al Señor)). Tú afirmas que a mi voz tu hijo ha exultado de alegría en tu seno, pero «mi espíritu exulta en Dios, mi Salvador...». Tú proclamas feliz a la que ha creído, pero el motivo de su fe y de su felicidad es la mirada que la bondad divina le ha dirigido. Sí, «todas las generaciones me llamarán bienaventurada, porque Dios ha puesto su mirada en la bajeza de su sierva» (San Bernardo). Esta hermosa paráfrasis del Magnificat nos permite captar al vivo las emociones del espíritu de María: se hunde en la humilde confesión de la propia nada, toca, por así decirlo, el fondo de su bajeza y luego, cuanto más bajo ha descendido, se eleva tanto más alto, se eleva a Dios, no temiendo reconocer y alabar las cosas grandes que El en Ella ha realizado, precisamente porque ve con toda claridad que esto es puro don suyo.
Si frente a tus éxitos, a las alabanzas y al aplauso de las criaturas, si ante las gracias que Dios te concede eres todavía capaz de vana complacencia, es precisamente porque no has tocado aún, como María, el fondo de tu bajeza, no te has hundido bastante en la consideración de tu nada, no te has convencido aún prácticamente de tu radical insuficiencia, impotencia, miseria y debilidad. Pide a María la gracia de introducirte en este conocimiento claro y práctico de tu nada. No te hagas ilusiones; el camino para arribar a esa meta, reservado a ti, que has heredado de Adán el germen del orgullo, es un camino áspero y duro: el camino de las humillaciones. Pero María es Madre; y si Ella te acompaña, con su ayuda se hará todo más fácil y suave.
Análisis digital) Redacción - 30/05/2006
El arzobispo de Madrid subraya en la entrevista publicada en el libro "Europa a debate. 20 años después (1986-2006)" que "la Iglesia ha intervenido en asuntos que tienen que ver con su enseñanza y que viven los católicos, aspectos de la vida personal o familiar"
El arzobispo de Madrid, cardenal Antonio María Rouco Varela, concedió una entrevista para el libro "Europa a debate. 20 años después (1986-2006)" cuyos autores son Miguel Ángel Benedicto Solsona y Ricardo Angoso García, editado por el Ministerio de Asuntos Exteriores y Cooperación y Plaza y Valdés, editores.
-¿Cuáles son los valores de Europa?
-Son aquellos que han nacido y se han desarrollado con la realidad europea. Desde mi punto de vista hay que hacer un ejercicio de objetividad de la historia de Europa que parte de la cultura grecorromana, de la historia cristiana que entra en ese mundo y emprende un camino que se define explícitamente como europeo a partir de Carlomagno.
Por otro lado, no hay que olvidar Bizancio, ya que Europa no sólo se construye desde e! lado occidental. Afirmar eso sería un error histórico. Juan Pablo II, uno de los grandes europeos del siglo XX, hablaba de los dos pulmones de Europa: oriental y occidental. Y si se quiere ser realista no se puede ignorar la Europa dividida y fraticida del siglo XX, y cómo se superó ese gran trauma.
Aunque la historia de Europa se inicie con Carlomagno, el discurso sobre los valores europeos comienza en la ilustración con la parte más radical y menos laicista y con una filosofía más inmanentista. Esa filosofía del Estado, de los derechos fundamentales, de la libertad, la fraternidad y la igualdad, no se explica sin una historia anterior, y desde el punto de vista intelectual no debe olvidar a los grandes teólogos. Creo que el presente europeo no reconoce plenamente los grandes valores a los que ha dado a luz: la raíz cristiana, la civilización judeocristiana y la herencia clásica grecorromana a las que hay que hay que añadir la visión ilustrada del siglo XVIII que no es separable de esa primera fuente.
-¿Cree usted que la UE tiene fronteras geográficas? ¿Hay que imponer un veto a países como Turquía o Ucrania?
-Juan Pablo II siempre dijo que Europa no es un concepto geográfico sino una categoría cultural. y es a la luz de esa definición cuando nos podemos plantear el asunto de las fronteras. Es evidente que Europa está dentro de! mundo cultural europeo y, evidentemente, Turquía no lo está. Europa fue cristiana y después laica. Es un problema grave y crítico sobre el que hay que reflexionar. Es bueno que haya relación y diálogo entre el mundo cristiano y el musulmán, un diálogo que ya existe desde el punto de vista religioso. Hay que actuar responsablemente dentro de la UE y saber si se quiere una Europa que ha sido un espacio cultural común o se quiere romper con esto.
-¿Qué modelo europeo prefiere usted?, ¿un modelo más económico en línea con el anglosajón u otro más político?
-Hay que buscar un modelo de Europa que permita una unidad lo más honda posible, trabada a través de relaciones mediatas y personales en los niveles pre económicos y pre políticos de las relaciones humanas, religiosas y morales.
Cuando visito Alemania no visito un país extraño, igual que cuando voy a Suiza, Francia o Italia. Se ha ganado mucho por la vía expresa, con una pedagogía cultural o religiosa cultivada a fondo. y es que no basta sólo con que se constituya un aparato político-jurídico-administrativo. Hay que hacer Europa desde abajo, desde las relaciones más personales: de amistad, de comunicación personal o de capas más hondas como la religión y la espiritualidad, para pasar después a las deportivas, a las culturales y al turismo. Eso es muy importante si se quiere construir Europa.
En un segundo momento, es evidente que cuantos más principios de unidad y solidaridad impregnen la organización del marco político europeo, mejor. Por ejemplo, el principio de subsidiariedad está impregnado de la tradición cristiana que tiene un peso en la construcción europea. No puede desaparecer la rica variedad de Europa, pero hay que buscar un equilibrio. En Europa hay grandes lenguas y deberíamos dominar dos o tres idiomas.
-¿No sería mejor tener una lengua común?
-Tiene que haber un equilibrio entre unidad y pluralismo, aunque en la práctica lo buscas cuando viajas y te comunicas con la gente.
«LA RELIGIÓN ES EL FACTOR DE MAYOR UNIDAD DE EUROPA.»
-¿ El acercamiento entre ciudadanos e instituciones se podría facilitar a través de la religión?
-La religión es el factor de mayor unidad en Europa, y la Iglesia católica es el mayor fenómeno de unidad en la UE. Aparte de los instrumentos de coordinación pastoral a nivel europeo, la unidad de inspiración, educación, cultura y valores del hombre son católicos y dan una fuerza de unidad grande. Un cristianismo vivo y una Iglesia católica joven y comprometida serían un servicio impagable e insustituible para el futuro de la UE. Se ofrece una especie de programa religioso, ético y espiritual.
-¿Qué echa de menos en la construcción europea?
-Echo en falta un cuadro de principios éticos y morales bien definidos; y una relación entre ese cuadro y la declaración de Derechos Humanos. Y también una concepción clara y no limitada de la relación entre el Estado social y democrático de Derecho y la economía social de mercado, que presidan e! despegue de! mundo y de Europa.
Deberían despejarse esas dudas y vacilaciones en torno a temas centrales como el derecho a la vida, a la familia y al matrimonio, que al igual que los derechos sociales, económicos y, como no, el derecho a la libertad, deseo que se establezcan.
-Pero se definieron bien en el tratado constitucional.
-Hay un intento de recogerlo anteriormente, y también en el preámbulo de! tratado, pero en términos mínimos y muy indefinidos.
-¿Qué han significado los veinte años de pertenencia de España a la UE?
-En la valoración de los resultados políticos y económicos coincido con la mayor parte de la opinión pública española. Desde el punto de vista de los valores, han sido buenos en general, y no veo que de la UE hayan salido asuntos muy negativos, pese a que ha habido algunas resoluciones problemáticas del Parlamento europeo, en cuanto a la bioética y el derecho a la vida, que no han ejercido una influencia muy decisiva.
-¿Cómo ve el papel de la familia en Europa?
-Es uno de los problemas más graves de la sociedad europea. Los datos demográficos son tan increíblemente alarmantes que a veces uno se pregunta cómo los responsables políticos permiten el descenso de la natalidad europea, que es perturbadora.
-Pero la inmigración parece que puede paliarlo.
-Se hace una cuenta muy materialista y poco valorativa de las personas. Una Europa que no quiere tener hijos y que espera a ver si los demás se los dan no se encuentra en la mejor disposición humana. En términos economicistas los resultados son muy inciertos, pero el problema, más que económico, es de convivencia. Es un problema de primer orden en todos los aspectos, políticos, familiares y de valores culturales. Una Europa así, cada vez con una proporción más enorme de personas mayores de 65 años que se sostiene a base de! endeudamiento progresivo, como en el caso de Alemania, donde no funciona e! sistema de seguridad social.
-¿Es el catolicismo en Europa uno de los retos de Benedicto XVI?
-Creo que sí. Es un reto que se plantea en términos positivos. El catolicismo europeo se encuentra con una presencia numérica y cualitativa que ha sido pujante, sobre todo tras la Segunda Guerra Mundial en Alemania, Austria, Francia y Suiza. Actualmente, no es lo mismo desde un punto de vista numérico, a excepción de Francia, España e Italia donde hay menos crisis. Sin embargo, tras la caída del Muro ha emergido un mundo católico con una vigorosa presencia en Polonia, Hungría, Eslovaquia, Ucrania y Rumania; y también en parte de los Balcanes. Juan Pablo II fue decisivo para animar y dar aliento a nuevos movimientos juveniles con una esperanza renovadora de la fe católica que aparece en toda la geografía europea. El Papa tiene un reto con un excelente futuro y un camino despejado pastoralmente.
-¿Existe una crisis de legitimidad en las instituciones europeas? ¿Se siente representado por ellas?
-No las hemos vivido como organismos representativos de la sociedad europea, sino como una representación de los Estados europeos. Pese a las elecciones al Parlamento europeo, las relaciones son débiles, ya que se viven a través de los gobiernos y los Estados. Además, no hay una noción del bien común. Es una de las lecciones a aprender.
-¿No cree que hay un desequilibrio en el colegio cardenalicio, al tener América Latina el 45% de los católicos del mundo y sólo 20 cardenales electores; mientras que Europa, con menos del 25%, cuenta con 58 cardenales?
-Hay que relativizar el valor de las dos categorías. No se determina en función de los criterios de población, sino más en función de razones personales. Se elige Papa en función de la calidad humana, no de la nacionalidad.
-¿No cree que la Iglesia se «entromete» en exceso en las labores del poder político?
-Se puede hacer la pregunta contraria. ¿Hasta donde puede el poder político regular los aspectos morales y éticos de la vida humana? Creo que el problema no es hasta dónde se mete la Iglesia en el terreno del poder político, sino más bien al revés, y además lo ha sido a lo largo de todo el siglo XX. Los Estados europeos del siglo pasado han intentado absorber al hombre y la sociedad. Ahora se quiere identificar con ética, la ética pública; pero se termina recortando la libertad y el desarrollo digno de la persona. Esta tentación es más fuerte que la contraria. La Iglesia ha intervenido en asuntos que tienen que ver con su enseñanza y que viven los católicos, aspectos de la vida personal o familiar.
Hemos sido neutrales con los partidos políticos como una pauta constante desde la preparación de la Constitución hasta hoy. Se legisla desde el Parlamento, pero se opina desde la sociedad y desde la Iglesia.
Comentario del padre Raniero Cantalamessa, ofmcap. --predicador de la Casa Pontificia-- al Evangelio del próximo domingo, solemnidad de la Ascensión.
La Ascensión del Señor
Hechos 1,1-11; Efesios 1,17-23; Marcos 16,15-20
La solemnidad de la Ascensión de Jesús «al cielo» es una ocasión para que nos aclaremos de una vez por todas las ideas sobre qué entendemos por «cielo». En casi todos los pueblos, el cielo se identifica con la morada de la divinidad. También la Biblia utiliza este lenguaje espacial. «Gloria a Dios en lo alto del cielo y paz en la tierra a los hombres». Con la llegada de la era científica, este significado religioso de la palabra «cielo» entró en crisis. Para el hombre moderno el cielo es el espacio en el que se mueve nuestro planeta y todo el sistema solar, y nada más. Conocemos la salida atribuida a un astronauta soviético, de vuelta de su viaje por el cosmos: «¡He recorrido mucho el espacio y no he encontrado por ninguna parte a Dios!».
Así que es importante que intentemos aclarar qué entendemos nosotros, los cristianos, cuando decimos «Padre nuestro que estás en los cielos», o cuando decimos de alguien que «se ha ido al cielo». La Biblia se adapta, en estos casos, al modo de hablar popular; pero ella bien sabe y enseña que Dios «está en el cielo, en la tierra y en todo lugar», que es Él quien «ha creado los cielos», y si los ha creado no puede estar «encerrado» en ellos. Que Dios esté «en los cielos» significa que «vive en una luz inaccesible»; que dista de nosotros «cuanto el cielo se eleva sobre la tierra». En otras palabras, que es infinitamente diferente de nosotros. El cielo, en sentido religioso, es más un estado que un lugar. Dios está fuera del espacio y del tiempo y así es su paraíso.
A la luz de lo que hemos dicho, ¿qué significa proclamar que Jesús «subió al cielo»? La respuesta la encontramos en el Credo: «Subió al cielo, y está sentado a la derecha del Padre». Que Cristo haya subido al cielo significa que «está sentado a la derecha del Padre, esto es, que también como hombre ha entrado en el mundo de Dios; que ha sido constituido, como dice San Pablo en la segunda lectura, Señor y cabeza de todas las cosas. Jesús subió al cielo, pero sin dejar la tierra. Sólo ha salido de nuestro campo visual. Él mismo nos asegura: «He aquí que yo estoy con vosotros todos los días hasta el fin del mundo» (Mateo 28, 16-20. Ndt).
Las palabras del ángel --«Galileos, ¿qué hacéis mirando al cielo?»-- contienen por lo tanto una advertencia, si no un velado reproche: no hay que quedarse mirando arriba, al cielo, como para descubrir dónde va a estar Cristo, sino más bien vivir en espera de su retorno, proseguir su misión, llevar su Evangelio hasta los confines de la tierra, mejorar la calidad de la vida en la tierra.
Cuando se trata de nosotros, «irse al cielo» o «al paraíso» significa ir a estar «con Cristo» (Flp 1,23). «Voy a prepararos un lugar... para que donde esté yo estéis también vosotros» (Jn 14,2-3). El «cielo», entendido como lugar de descanso, de la recompensa eterna de los buenos, se forma en el momento en que Cristo resucita y sube al cielo. Nuestro verdadero cielo es Cristo resucitado, con quien iremos a reunirnos y a hacer «cuerpo» después de nuestra resurrección, y de manera provisional e imperfecta inmediatamente tras la muerte. Por lo tanto Jesús no ascendió a un cielo ya existente que le esperaba, sino que fue a formar e inaugurar el cielo para nosotros.
Hay quien se pregunta: ¿pero qué haremos «en el cielo» con Cristo toda la eternidad? ¿No nos aburriremos? Respondo: ¿aburre tal vez estar bien y con óptima salud? Preguntad a los enamorados si se aburren de estar juntos. Cuando sucede que se vive un momento de intensísima y pura alegría, ¿no nace a lo mejor en nosotros el deseo de que dure para siempre, de que no acabe jamás? Aquí abajo tales estados no duran para siempre, porque no existe objeto que pueda satisfacer indefinidamente. Con Dios es diferente. Nuestra mente hallará en Él la Verdad y la Belleza que nunca acabará de contemplar, y nuestro corazón el Bien del que jamás se cansará de gozar.
(EL DÍA, 23 - V)
El Delegado Episcopal de Cáritas Diocesana invita a los sacerdotes a una reflexión sobre la acción caritativa y social en el proceso evangelizador de la Iglesia.
A/A de todos LOS SACERDOTES:
LES RECUERDO QUE ESTE VIERNES 26 DE MAYO en horario de 10 a 12 horas, en el Seminario, el Delegado Episcopal de Cáritas Española, RVDO. SR. D. ANTONIO BRAVO TISNER, ofrecerá, para los Sacerdotes, una reflexión sobre LA ACCIÓN CARITATIVA Y SOCIAL EN EL PROCESO EVANGELIZADOR DE LA IGLESIA.
Además te agradecemos que invites a los voluntarios de Cáritas y a otros agentes de pastoral social, así como, a los fieles en general, a la misma reflexión el VIERNES 27 DE 5 A 7h o EL SÁBADO 28 DE 10 A 12h. en el Seminario.
Gracias por tu interés y por dar a conocer esta oferta formativa a los que tienes encomendados, fraternalmente.
Domingo Navarro Mederos
La Sra. Alcaldesa de La Guancha envió un SALUDA por las Fiestas de Ntra. Sra. de Coromoto en la Guancha de Abajo en el pasado año de 2005, que reproducimos a continuación.
SALUDA FIESTAS DE LA GUANCHA DE ABAJO. VIRGEN DE COROMOTO.
Por todos es sabido que el mes de mayo es el mes de la Virgen, el mes de las flores, del colorido y de las fiestas. Es la época, por excelencia, en la que más feligreses celebran el día de su patrona o patrono. Tal es el caso que aquí nos ocupa. Los vecinos de La Guancha de Abajo están de enhorabuena. Se acercan las fechas en las que rinden homenaje a la que es su guía espiritual: la Virgen de Coromoto.
Del 22 al 26 de mayo los guancheros que tienen la dicha de vivir en este barrio están unidos, más que nunca, con la octava Isla Venezuela. Al igual que ellos tienen como patrona a la Virgen de Coromoto. No en vano fue un emigrante a tan lejanas tierras el responsable de que la ermita y su plaza se erijan desde este pequeño enclave (a medio camino entre la costa y el monte) como refugio sagrado que invita a visitarla a todo aquel que la encuentra a su paso o que la descubre, como fuerte victorioso, ya desde la carretera.
¡ Quién le iba a decir a José Velázquez (Guanchero de nacimiento) que el santuario que un día encargó construir se convertiría en el templo al que hoy acuden muchos a pedir ayuda y consuelo, o, simplemente, a ofrecer a la Virgen de Coromoto su gratitud por los favores concedidos
Fue allá por el año 1957, después de sufrir un accidente de aviación del que salió ileso, cuando este benefactor decidió dar las gracias a quien puso su mano para cuidarle en tan grave trance acaecido en Venezuela (la patrona de la Isla, la Virgen de Coromoto) Y decidió construir una ermita (con su plaza) que acogiera a la Señora que lo guió, y que en ella pudieran rezarle todos los guancheros.
Ahora, casi medio siglo después, la devoción de sus fieles ha ido aumentando hasta tal punto que preparan con esmero y dedicación un programa de actividades que esté a la altura de tamaña celebración. Los días de la fiesta ofrecen a los vecinos y a todo aquel que quiera participar de ella, la posibilidad de disfrutar con la música, el deporte, y, también, el culto a la Virgen de Coromoto.
Viste el templo, este año, sus mejores galas, pues está siendo rehabilitado (por el Ayuntamiento de La Guancha y el Cabildo de Tenerife) para que melva a lucir, en todo su esplendor, como el referente que ha sido desde su construcción. No queda más, por tanto, que comenzar la fiesta.
Ya está todo preparado para que la alegría inunde las calles, para que el olor a comida preparada con cariño y a dulces típicos lo embargue todo. Vecinos de la Guancha Abajo, comienzan las fiestas de la Virgen de Coromoto 2003. Que nadie se quede en casa sin disfrutarlas. Que todos seamos uno junto a nuestra patrona.
La Alcaldesa
Elena Luis
Se están acercando las Fiestas en honor de Ntra. Sra. de Coromoto, en la Guancha de Abajo, en la ermita del mismo nombre. Recogemos aquí con este motivo la INVITACIÓN A LAS FIESTAS que dirigió en pasado año el párroco.
FELIZ LA QUE HA CREIDO
Estimados feligreses:
Las Fiestas de Ntra. Sra. de Coromoto se enmarcan en este año de 2005 especialmente dedicado a la Eucaristía y a los 150 años de la proclamación del dogma de la Inmaculada Concepción. No seríamos justos si, contemplando la imagen de Ntra. Sra. de Coromoto presentando a su Hijo en las rodillas, pasáramos por alto la oportunidad que nos brindan de hacer una reflexión sobre la figura de María como madre y modelo en relación con el misterio eucarístico. Afirma el Papa en la Encíclica Ecclesia de Eucaristía : “Si queremos descubrir en toda su riqueza la relación íntima que une Iglesia y Eucaristía, no podemos olvidar a María, Madre y modelo de la Iglesia ” (n. 53).
María es Madre de la Iglesia por ser Madre de Cristo, por haberle dado la carne y la sangre; esa carne y esa sangre que en la Cruz se ofrecieron en sacrificio y se hacen presentes en la Eucaristía. Este es el aspecto más inmediatamente perceptible de aquella "relación profunda" de la Virgen con el misterio eucarístico.
Pero María también es modelo: " La Iglesia , tomando a María como modelo, ha de imitarla en su relación con este altísimo misterio" ( Ecclesia de Eucharistia n. 53).Debemos imitar, ante todo, su fe y su amor, en la anunciación y en la visitación a Isabel, donde María es realmente sagrario vivo de Cristo; en el Calvario y, más allá, cuando recibió la Comunión eucarística de manos de los Apóstoles. Una fe y un amor que se desbordan en alabanza y en acción de gracias.
Cuando María era ya tabernáculo vivo del Hijo de Dios encarnado, escuchó aquella alabanza "Feliz la que ha creído” (Lc 1, 45). María con su fe ha anticipado también la fe eucarística de la Iglesia. Cuando en la Visitación lleva en su seno el Verbo hecho carne, se convierte de algún modo en "tabernáculo" —el primer "tabernáculo" de la historia— donde el Hijo de Dios, todavía invisible a los ojos de los hombres, se ofrece a la adoración de Isabel, como "irradiando" su luz a través de los ojos y la voz de María" ( Ecclesia de Eucharistia n. 55).
Considerar a María como modelo de fe eucarística nos lleva necesariamente a contemplarla al pie de la Cruz de su Hijo, ya que el sacrificio de la Eucaristía es el memorial sacramental que hace presente el sacrificio del Calvario. En realidad, como escribe Juan Pablo II, "María, con toda su vida junto a Cristo y no solamente en el Calvario, hizo suya la dimensión sacrificial de la Eucaristía. Cuando llevó al niño Jesús al templo de Jerusalén "para presentarle al Señor" (Lc 2, 22), oyó anunciar al anciano Simeón que aquel niño sería "señal de contradicción" y también que una "espada" traspasaría su propia alma (cfr. Lc 2, 34.35). Se preanunciaba así el drama del Hijo crucificado. María vive una especie de "Eucaristía anticipad”. Vive una "comunión espiritual" de deseo y ofrecimiento, que culminará en la unión con el Hijo en la pasión y se manifestará después en su participación en la celebración eucarística, presidida por los Apóstoles, como "memorial" de la pasión" ( Ecclesia de Eucharistia n. 56).
Que Santa María en su advocación de Coromoto, presente como modelo y Madre de la Iglesia en todas las celebraciones eucarísticas, nos enseñe a tratar a Jesús, a reconocerle y a encontrarle en los diversos actos de las fiestas de La Guancha de Abajo, de modo especial, en ese instante supremo del Santo Sacrificio de la Misa.
Sebastián García Martín
Párroco
En el programa de Fiestas de Ntra. Sra. de Coromoto en la Guancha de Abajo en contramos el siguiente saludo de la Sra. Alcaldesa del municipio.
SALUDA FIESTAS EL COROMOTO 2006
LA GUANCHA DE ABAJO
La historia de la Virgen de Coromoto, al igual que la nación que la alberga (Venezuela), ha cautivado el alma de los numerosísimos isleños, que por circunstancia de la emigración —tan de moda ahora mismo-siempre encontraron bajo su amparo protección y cariño.
Canarias, que tiene mucho que agradecer a aquella tierra, cuenta con numerosos símbolos o tradiciones traídos de allá, costumbres que han ido calando en nuestro carácter y en nuestra manera de ser. Una de las más características es el culto de la Virgen de Coromoto —Patrona desde 1952 de Venezuela- y que en La Guancha de Abajo encontró un sitio desde 1957, año de la inauguración de su pequeño santuario guanchero, y que cumplirá el año que viene la cincuentena. Esta será una fecha para celebrar en fiesta, aún más si cabe, la devoción por la Virgen vencedora del indio, del pagano, según cuenta su historia.
Pero la fiesta también es una excusa al año que nos ayuda a reencontramos con muchos amigos o familiares que viven lejos. En El Coromoto, balcón privilegiado de La Guancha hacia la costa, la coqueta Plaza de Venezuela vuelve a tomar el color de los papeles y las banderas. Vuelve a hervir con el ir y venir de grandes y chicos que acuden entusiastamente a los diferentes actos organizados por las sacrificadas comisiones, que a pesar del paso de los años y del cambio en los gustos del ocio, siguen erre que erre juntando los euros para brindar a la patrona espiritual unos días llenos de actos litúrgicos y recreativos al aire libre, con los que consumar el milagro de la convivencia sana y alegre, en la que se pueda olvidar —al menos por unas horas- los problemas o las jaquecas cotidianas.
Este mes de mayo, que nos llevará de nuevo en masa a la hermosa ermita de la patrona venezolana, pero en nuestro querida Guancha de Abajo, volveremos a evocar el recuerdo de los que ya no están y de los que aún siguen en aquella tierra caribeña, que durante tantos años enviaron bolívares para nosotros superar la dureza del racionamiento y la escasez más dura.
Vecinos de La Guancha de Abajo, y de La Guancha en general, que esta fiesta sirva para encontramos en tomo a sus actividades e invitemos a todo aquel que quiera saber cómo es de abierto y acogedor el guanchero, a pasar unos días con nosotros. Disfrutemos intensamente de la fiesta, disfrutemos del cariño de nuestra Virgen de Coromoto. Allí nos vemos.
La Alcaldesa, M Elena Luis Domínguez
19 mayo 2006 ZENIT publica el discurso que dirigió Benedicto XVI este viernes a los participantes en el congreso organizado por la Fundación «Centesimus Annus Pro Pontifice» sobre «Democracia, instituciones y justicia social».
Señor cardenal,
venerados hermanos en el episcopado y en el presbiterado,
queridos hermanos y hermanas:
Con alegría os doy la bienvenida por primera vez y os saludo cordialmente a todos. Saludo especialmente al señor cardenal Attilio Nicora, presidente de la Administración del Patrimonio de la Sede Apostólica, así como al presidente de la Fundación, el conde Lorenzo Rossi di Montelera, a quien le doy las gracias por las palabras que me ha dirigido en vuestro nombre. Saludo a los obispos presentes y a vuestros asistentes espirituales sacerdotes. A cada uno de vosotros os expreso aprecio y gratitud por el servicio que ofrecéis al sucesor de Pedro y por la generosidad con la que apoyáis su actividad apostólica.
El nombre mismo de vuestra fundación indica con claridad las apreciables finalidades que perseguís. «Centesimus Annus» hace referencia a la última gran encíclica social de Juan Pablo II, con la que el inolvidable pontífice, resumiendo cien años de Magisterio en este campo, proyectaba hacia el futuro a la Iglesia, estimulando la discusión con la «res novae» del tercer milenio. «Centesimus Annus» expresa también vuestro compromiso de colaborar para que en las diferentes áreas del mundo contemporáneo la doctrina social desempeñe de manera clara su tarea a favor de la difusión del Evangelio. El calificativo de «Pro Pontifice» subraya, a su vez, vuestra intención de cultivar una cercanía particular con la tarea pastoral del obispo de Roma, comprometiéndoos a colaborar, según vuestras fuerzas, en el apoyo de los instrumentos concretos que él necesita para animar y alentar la presencia de la Iglesia en todo el mundo. Habéis comenzado vuestra actividad en un ámbito sobre todo italiano; ahora veo con alegría que la estáis desarrollando progresivamente en otras áreas de Europa y de América. La naturaleza de la Fundación vaticana os capacita y os orienta hacia estos grandes horizontes.
Vuestro congreso sobre «Democracia, instituciones y justicia social» afronta problemas de gran actualidad. A veces se lamenta la lentitud con que se abre camino la democracia y, sin embargo, sigue siendo la herramienta histórica más valiosa, si se utiliza bien, para disponer del propio futuro de forma digna. Con razón, habéis señalado dos puntos críticos en el camino hacia un ordenamiento más maduro de la convivencia humana. Se requieren, en primer lugar, instituciones apropiadas, creíbles y autorizadas, que no estén orientadas a la mera gestión del poder público, sino que sean capaces de promover niveles articulados de participación popular, en el respeto de las tradiciones de cada nación, y con la constante preocupación de custodiar su identidad. Del mismo modo es urgente un esfuerzo tenaz, duradero y compartido por la promoción de la justicia social. La democracia sólo alcanza su plena realización cuando cada persona y cada pueblo es capaz de acceder a los bienes primarios (vida, comida, agua, salud, educación, trabajo, certeza de los derechos) a través de un ordenamiento de las relaciones internas e internacionales que asegure a cada quien la posibilidad de participar. Y sólo puede haber auténtica justicia social en una perspectiva de genuina solidaridad, que comprometa a vivir y a trabajar siempre los unos por los otros, y nunca los unos contra o en perjuicio de los otros. El gran desafío de los cristianos laicos en el contexto mundial de hoy consiste en hacer concreto todo esto.
Queridos amigos, a través de la fundación «Centesimus Annus» contribuís, junto a otras asociaciones, a hacer que crezca el conocimiento de la doctrina social con la que la Iglesia, como he escrito en la encíclica «Deus caritas est», pretende «contribuir a la purificación de la razón y a reavivar las fuerzas morales, sin lo cual no se instauran estructuras justas ni estas pueden ser operativas a largo plazo» (n. 29). Que cada uno de vosotros, en cuanto fiel laico, haga suyo «el deber inmediato de actuar en favor de un orden justo en la sociedad!», porque «la caridad debe animar toda la existencia de los fieles laicos y por tanto, su actividad política, vivida como "caridad social"» (ibídem).
Que nuestro encuentro de hoy sirva para confirmaros en este generoso compromiso. Al regresar a vuestras responsabilidades diarias, sentíos cada vez más unidos en el vínculo de la comunión católica y vivid con pasión los compromisos que habéis asumido. Os doy las gracias también por el don que vuestro presidente me ha entregado para apoyar las obras de mi ministerio pastoral. Y, mientras invoco sobre vosotros y sobre vuestras familias la protección maternal de María, os bendigo a todos de corazón.
15 de mayo
(Fuente de la Guancha) “San Isidro nos invita a ser sarmientos de la Iglesia, que produzcan buenos frutos de amor, de paz, de testimonio cristiano, a amar a la Iglesia, a ser miembros activos de ella, colaborando, enseñando a otros, educando en la fe”, palabras que fueron desarrolladas en la homilía al grupo de vecinos que se reunió en el templo parroquial para celebrar al Patrono de los Agricultores.
Un año más la Empresa de Aluminios “Tahoro” se encargó del arreglo floral, de anunciar e invitar a la celebración de la Eucaristía.
La imagen fue llevada a hombros en procesión por los empleados de la empresa. Fue traída a la parroquia el año 1965 por la Hermandad Sindical Agraria con motivo de la declaración de San Isidro como patrono de los agricultores españoles por Juan XXIII. El pueblo de La Guancha , por esos años, era eminentemente agricultor.
(Estamos construyendo un templo)
13 de Mayo
Ponemos en nuestro Blog el art?culo publicado en la Hoja de Difusi?n Parroquial "Como las Hormigas", n?mero 46, de Santa Rita de Casia de Punta Brava y de San Pablo Ap?stol en las Dehesas - Puerto de la Cruz.
TODOS BUSCAMOS SEGURIDADES.- Todos buscamos alguien en quien con-fiar. Todos buscamos seguridades, y tratamos de asegurar todo, el coche, la casa, contra incendios, contra robos, cajas de seguridades, caja fuerte, hasta queremos garantizar la vida y hacemos un seguro de vida, aseguramos las pensiones. Cu?ntas veces tenemos que decir: ?T? est?s seguro? ?Esto est? seguro? No me f?o ni un pelo. Aseg?rate que es verdad. Trabaje; pero seguro; y te exigen medidas de Seguridad para las obras y como no se f?an mandan un inspector y te obligan a ponerte el cintur?n de seguridad. Y en tantos comercios ponen un agente de seguridad y hasta hay cerraduras de seguridad.
CASI TODO EL MUNDO VA A ESCAPAR.- Todos tenemos miedo de que nos enga?en y por muchas precauciones que tengamos al fin nos enga?an y nos dan gato por liebre, y nos enga?an con la mercanc?a, o el que te vende una m?quina, o te enga?an en el peso, o en la medida, o en la calidad del producto. Todo el mundo va a escapar. S?lvese quien pueda. Y site pueden hundir te hunden. Les importa nada ni que tengas depresiones, ni que llores, ni que te tires de un octavo piso. Esas famosas frases tan duras que tantas veces hemos o?do: b?scate la vida colega. Ese es.... tu problema. All? t?. A mi me importa un bledo, a mi me importa un comino o un pepino. Qu? m?s da ?Quien se f?a de quien? ?En qui?n conf?as t? para decirle un secreto de tu vida?. ?Ustedes ven c?mo se filtran los mayores secretos, a?n los secretos de estado? T? le dices a una persona de tu confianza un secreto, ?sta a su vez se lo dice en confianza a otra, y esta a otra y as? de secreto en secreto al final sabe todo el mundo lo que nunca debi? saber nadie. Y viene entonces los desenga?os, las desilusiones, las traiciones, iQu? duro suena! ?Verdad? Tener que decir: me has traicionado, me has descubierto, y mira que te dije que no lo dijeras a nadie. Y te encuentras desamparado, desorientado, sin saber para donde tirar, o a donde acudir, y vienen las depresiones, la tristeza, y empiezas a desconfiar de todo y de todo el mundo.
Y pisas en un escal?n y preguntas ?Est? segura est? escalera? ?Estar? segura esta baranda? ?La puerta est? bien asegurada? ?T? estas seguro de que es as?? ?Este dinero es falso o es verdadero? ?Y est? cheque tiene fondo? iNo te olvides que es "devuelva"! ?C?mo qu? es de vuelva? iQue tienes que devolverlo!
Una vez le ped? prestado un bol?grafo a una persona que iba sentada al lado m?o en el avi?n y me dijo iEs de Huelval. Yo entend? que era de la ciudad de Huelva y me aclar?, iQue tiene que devolv?rmelo! Y al final a pesar de tanta recomendaci?n por un despiste llegu? con el bol?grafo a Canarias "sin devolverlo" Por eso he cre?do conveniente hablar de la confianza en Dios.
Al final es el amigo que nunca falla, segur?simo y en quien podemos de verdad confiar. Se?or en t? confi?, decimos. O, Coraz?n de Jes?s en t? confi?. Se?or en ti tengo puestas todas mis esperanzas.
TENEMOS QUE PEDIR MUCHA FE A DIOS.- Claro, que tenemos que pedirle mucha fe a Dios, porque no le vemos con los ojos de la carne y puede parecernos que estamos hablando con las paredes, que no estamos hablando con nadie, que no experimentamos la presencia de ese grandioso ser que es Dios.
Yo tambi?n soy un creyente que busco a Dios, que busco en quien confiar, yo busco, como todos, seguridades, y tambi?n puedo experimentar el vac?o de no tener a quien decirle algo confidencial. La oraci?n, muchas veces, es dura, y a pesar de que sepamos te?ricamente que Dios existe y que est? dentro de nosotros y que est? en todas partes, nos cuesta en verdad hacer el silencio dentro de nosotros, "cerrar los ojos para ver" y escuchar a Dios. Porque est? claro que queremos palparlo todo, y aunque sabemos que existe lo espiritual, lo que realmente vemos es lo f?sico. No es lo mismo imaginarse el estar comi?ndose un bocadillo de jam?n que comerse el bocadillo de verdad.
Por eso vamos a dar por sentado que creemos que existe Dios, que creemos adem?s que Dios es bueno, que Dios nos quiere, que Dios busca por encima de todo nuestro bien. Que creemos en verdad que Dios nos quiere ayudar, que estamos con-vencidos de que nuestros problemas son problemas de Dios, y que todo lo que ?l nos dice "va a misa". Nunca mejor dicho, y que su palabra es "palabra de Dios" que siempre es la verdad y que segur?simo que podemos fiarnos de lo que ?l dice porque jam?s nos enga?ar?.
DIOS NUNCA PIERDE LA GUAGUA.- Entonces vamos a repetir algunas pa-labras de El. Un d?a dijo: Est?n tranquilos porque yo estar? con ustedes todos los d?as, hasta que se acabe el mundo... Vengan a mi todos los que est?n cansados y agobia-dos que yo les aliviar?... No se preocupen por la comida, por el vestido que el Padre Dios sabe que ustedes necesitan de todo eso. Preoc?pense por el reino de Dios y su futuro que lo dem?s se les dar? por a?adidura. Vamos a poner las cosas de nuestra confianza en Dios, porque podemos confiar en Dios.
Para Dios nada hay imposible porque es todopoderoso
Para Dios nada es dif?cil porque es sabidur?a infinita, lo sabe todo.
Dios tiene un deseo infinito de nuestro bien; porque es la bondad infinita.
Dios nos quiere, somos sus hijos, y somos el principal problema de Dios, m?s que el Sol y las estrellas y el mar y las flores.
Dios est? presente en todo, lo ve todo, lo conoce todo. Y por encima de todo es el padre, m?s padre y la madre m?s madre de todas las madres, y busca siempre todo lo mejor para nosotros.
Por ?ltimo, si alguna cosa nos sucede mal, o nos sale al rev?s, o se nos estropean los planes, o no nos salen las cosas como quer?amos es que Dios lo permite por nuestro bien.
DIOS EXISTE. ES VERDAD.- En el mundo ocurren solamente dos cosas con respecto a Dios y hemos de tener claro si creemos que existe un solo Dios. Y yo estoy hablando para los que creen que existe un solo Cielo y un solo Dios, aunque se vaya a El por caminos distintos.
1. Dios quiere siempre el bien. No puede contradecirse a si mismo. No puede querer ninguna clase de mal, ni enfermedades, ni dolor, ni cat?strofe, ni cr?menes, ni sui?cidios, ni hambre en el mundo, ni paro, ni guerras, ni robos, ni mentiras, ni injusticias, ni muertes de ni?os inocentes.
2. Dios permite el mal. Porque respeta la libertad humana, porque respeta las leyes de la naturaleza creada por El mismo y desordenada desde que el hombre empez? a pecar y ha seguido pecando, aunque esto no lo entendamos.
Dios es maravilloso, sue?a con nosotros, se ilusiona con el proyecto que ha preparado para nosotros y nos quiere agradar para que seamos felices. Dios nos puso en este mundo encantador para que seamos felices. Pienso que vale la pena el confiar en alguien que nos quiere tanto y que est? tan preocupado por nosotros. Vamos a seguir ayud?ndonos, demos un voto de confianza.
Antonio Mar?a Hern?ndez. Hern?ndez