Discurso del Papa Benedicto XVI al primer grupo de obispos de M?xico en visita ?ad limina Apostolorum?, el jueves, 8 de septiembre de 2005
La familia, primera escuela de la vida y de la fe
"Las formas tradicionales de vivir la fe, transmitidas de manera sincera y espont?nea a trav?s de las costumbres y ense?anzas familiares, han de madurar en una opci?n personal y comunitaria. Esta formaci?n es particularmente necesa?ria para los j?venes que, al dejar de frecuentar la comunidad eclesial tras los sacramentos de iniciaci?n, se encuentran ante una sociedad marcada por un creciente pluralismo cultural y religioso. Adem?s, se enfrentan, a veces muy solos y como desorientados, a corrientes de pensamiento seg?n las cuales, sin necesidad de Dios e incluso contra Dios, el hombre alcanza su plenitud a trav?s del poder tecnol?gico, pol?tico y econ?mico. Por eso se ve la necesidad de acompa?ar a los j?venes y convocarlos con entusiasmo para que, integrados de nuevo en la comunidad eclesial, asuman el compromiso de transformar la sociedad como exigencia fundamental del seguimiento de Cristo.
Asimismo, las familias requieren un acompa?amiento adecuado para poder descubrir y vivir su dimensi?n de ?iglesia dom?stica?. El padre y la madre necesitan recibir una for?maci?n que les ayude a ser los ?primeros evangelizadores? de sus hijos; s?lo as? podr?n realizarse como la primera
escuela de la vida y de la fe. Pero el solo conocimiento de los contenidos de la fe no suple jam?s la experiencia del encuen?tro personal con el Se?or. La catequesis en las parroquias y la ense?anza de la religi?n y de la moral en las escuelas de inspiraci?n cristiana, as? como el testimonio vivo de quienes lo han encontrado y lo transmiten, con el fin de suscitar el anhelo de seguirlo y servirlo con todo el coraz?n y toda el alma, deben favorecer esta experiencia de conocimiento y de encuentro con Cristo".