Mi?rcoles, 02 de agosto de 2006
Mensaje y ensenanzas de la ermita de San Blas y la cueva de Achbinico, que se encuentran en el libro "LA RUTA VIRGEN DE CANDELARIA", por Don Dami?n Iguacen Borau, obispo em?rito de Tenerife.

Mensaje y ense?anzas.



1) Acojamos el mensaje. Hay aqu? una fuerte llamada a revisar nuestra religiosidad, para que sea pura, sincera y verdadera, sin mezcla de supersticiones ni fariseismos. La religiosidad que se nos pide no consiste en hacer "promesas" de dar o hacer "cosas" y venir a cumplirlas; la religiosidad que se nos pide va mucho m?s all?, llega al coraz?n: "Hijo m?o, dame tu coraz?n"; una religiosidad que no nos haga mejores, no es verdadera religiosidad, no agrada a la Virgen de Candelaria, aunque le traigamos flores, velas y ofrendas. Aqu? hay una llamada a la conversi?n; como si nos dijera: No quiero tus cosas, te quiero a ti.

2). Este fue un lugar de penitencia. "Lavaos, purificaos, apartad de mi vista vuestras malas acciones, cesad de obrar el mal, aprended a obrar bien, buscad la justicia, defended al oprimido, sed abogados del hu?rfano, defensores de la viuda. Entonces, venid". (Is.1,10-18).

3). Este fue un lugar de retiro y oraci?n, morada de anacoretas y ermita?os. Aqu? hemos de sentir una fuerte llamada a la vida de oraci?n, reflexi?n y meditaci?n, al cultivo de la vida interior. "La tierra est? desolada porque no hay quien piense en su coraz?n", se lamenta el profeta Jerem?as. La oraci?n es una dimensi?n fundamental de nuestra fe, es expresi?n de nuestra fe en Dios; ser creyente es ser orante. Nuestra respuesta ala Palabra de Dios, que hemos de escuchar en nuestro coraz?n, ya que en ella nos revela el misterio m?s ?ntimo de su amor, no consiste sobre todo en pensar, sino en dar gracias: es la oraci?n. Jesucristo nos exhorta una y otra vez a la oraci?n constante, perseverante. La oraci?n es una exigencia de la fidelidad a Jesucristo: nadie puede se?guir a Jesucristo sin orar. La oraci?n es apertura a Dios, elevaci?n del coraz?n a Dios, encuentro del hombre con Dios y con los hombres a quienes Dios ama y quiere salvar. La oraci?n es un di?logo de amistad, una conversaci?n con Dios.

4). Aqu? se celebraron liturgias abundantes y se dministraron los sacramentos de vida. Acojamos el mensaje que nos invita a una seria vida sacramental. Los sacramentos son las formas visibles de la gracia y del amor de Dios, signos con los que confesamos nuestra fe, que no solo suponen la fe, sino que tambi?n la alimentan, la robustecen y la expresan. A trav?s de los sacramentos, Jesucristo resucitado est? permanentemente cerca de nosotros con su gracia, con su misericordia y su nueva vida. En los sacramentos est? presente el mismo Jesucristo como Salvador y por eso. en ellos se hace presente tambi?n su obra salvadora; no s?lo despiertan la fe y la robustecen, sino que tambi?n producen la gracia que significan, son instrumentos que producen la gracia. No son acciones privadas, sino celebraciones lit?rgicas de la misma Iglesia. por tanto tienen un car?cter comunitario.

5) Aqu?, desde los comienzos de la evangelizaci?n, "hicieron altar y celebraron los oficios divinos". Recojamos un mensaje muy especial que e n esta sagrada cueva se nos transmite y es la importancia de la Eucarist?a, la Misa, para la vida cristiana. En ella se nos hace presente Jesucristo como alimento para tener vida divina en nosotros; quien no come ni se alimenta, muere; la Misa no es una relaci?n con los muertos, no est? en funci?n de los muertos, aunque puede aplicarse por los difuntos. La Eucarist?a, como renovaci?n sacramental de la oblaci?n ?nica de Jesucristo en la celebraci?n lit?rgica, es al mismo tiempo sacrificio de alabanza y sacrificio propiciatorio y expiatorio. El fruto de la comuni?n es principalmente la uni?n ?ntima con Jesucristo, pero significa y realiza la uni?n no s?lo de cada fiel con Jesucristo, sino de los fieles entre s? y la unidad de la Iglesia en Cristo. La celebraci?n eucar?stica presupone y al mismo tiempo fomenta la reconciliaci?n fraterna y la comuni?n ?com?n uni?n? en el interior de la comunidad.
Publicado por verdenaranja @ 22:02  | Espiritualidad
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