ZENIT publica la intervenci?n de Benedicto XVI en la audiencia general de este mi?rcoles, 17 de Enero de 2007, dedicada a la Semana de Oraci?n por la Unidad de los Cristianos que en la mayor parte de los pa?ses se celebra tradicionalmente del 18 al 25 de enero.
Queridos hermanos y hermanas:
Comienza ma?ana la Semana de Oraci?n por la Unidad de los Cristianos, que clausurar? personalmente en la bas?lica de San Pablo Extramuros, el pr?ximo 25 de enero, con la celebraci?n de las V?speras, a las que han sido invitados tambi?n los representantes de las dem?s iglesias y comunidades eclesiales de Roma.
Los d?as del 18 al 25 de enero, y en otras partes del mundo, la semana en torno a Pentecost?s, son un tiempo fuerte de compromiso y de oraci?n por parte de todos los cristianos, quienes pueden servirse de los subsidios elaborados conjuntamente por el Consejo Pontificio para la Promoci?n de la Unidad de los Cristianos y por la Comisi?n ?Fe y Constituci?n? del Consejo Mundial de las Iglesias.
He podido experimentar c?mo es profundo el deseo de la unidad en los encuentros que he mantenido con varios representantes de las iglesias y comunidades eclesiales a lo largo de estos a?os, y de manera conmovedora en la reciente visita al patriarca ecum?nico Bartolom? I, en Estambul, Turqu?a. El pr?ximo mi?rcoles volver? a afrontar estas y otras experiencias que han abierto mi coraz?n a la esperanza.
Ciertamente el camino de la unidad sigue siendo largo y dif?cil; sin embargo, es necesario no desalentarse y seguir recorri?ndolo, contando en primer lugar con el seguro apoyo de Aqu?l que, antes de subir al cielo, prometi? a los suyos: ?he aqu? que yo estoy con vosotros todos los d?as hasta el fin del mundo? (Mateo 28, 20). La unidad es don de Dios y fruto de la acci?n del Esp?ritu. Por este motivo es importante rezar. Cuanto m?s nos acercamos a Cristo convirti?ndonos a su amor, m?s nos acercamos tambi?n los unos a los otros.
En algunos pa?ses, entre los que se encuentra Italia, la Semana de Oraci?n por la Unidad de los Cristianos es precedida por la Jornada de Reflexi?n Judeocristiana, que se celebra hoy precisamente, 17 de enero. Desde hace casi dos d?cadas, la Conferencia Episcopal Italiana dedica esta Jornada al juda?smo con el objetivo de promover el conocimiento y la estima y para incrementar la relaci?n de amistad rec?proca entre la comunidad cristiana y la jud?a, relaci?n que se ha desarrollado positivamente tras el Concilio Vaticano II y tras la hist?rica visita del siervo de Dios Juan Pablo II a la Sinagoga Mayor de Roma. La amistad judeocristiana para crecer y ser fecunda tambi?n debe fundamentarse en la oraci?n. Invito por tanto a todos a dirigir hoy una invocaci?n insistente al Se?or para que jud?os y cristianos se respeten, se estimen y colaboren juntos por la justicia y la paz en el mundo.
Este a?o el tema b?blico propuesto a la reflexi?n com?n y a la oraci?n en esta ?Semana? es: ?Hace o?r a los sordos y hablar a los mudos? (Marcos 7, 37). Son las palabras del Evangelio de Marcos y se refieren a la curaci?n de un sordomudo por parte de Jes?s. En esta breve per?copa, el evangelista narra que el Se?or, despu?s de haber puesto los dedos en los o?dos y despu?s de haber tocado con la saliva la lengua del sordomudo, realiz? el milagro diciendo: ?Effat?, que significa, ???brete!?. Al recuperar el o?do y el don de la palabra, aquel hombre suscit? la admiraci?n de los dem?s contando lo que le hab?a sucedido. Todo cristiano, espiritualmente sordo y mudo a causa del pecado original, con el Bautismo recibe el don del Se?or que pone sus dedos en la cara y, de este modo, a trav?s de la gracia del Bautismo, es capaz de escuchar la palabra de Dios y de proclamarla a los hermanos. Es m?s, a partir de ese momento tiene la tarea de madurar en el conocimiento y en el amor de Cristo para poder anunciar y testimoniar con eficacia el Evangelio.
Este tema, al ilustrar dos aspectos de la misi?n de toda comunidad cristiana, el anuncio del Evangelio y el testimonio de la caridad, subraya tambi?n la importancia de traducir el mensaje de Cristo en iniciativas concretas de solidaridad. Esto favorece el camino de la unidad, pues se puede decir que todo alivio, aunque sea peque?o, que los cristianos ofrecen juntos al sufrimiento del pr?jimo, contribuye a hacer m?s visible tambi?n su comuni?n y su fidelidad al mandamiento del Se?or.
La oraci?n por la unidad de los cristianos, sin embargo, no puede limitarse a una semana del a?o. La invocaci?n conjunta al Se?or para que realice, cuando y como ?l s?lo sabe, la plena unidad de todos sus disc?pulos debe extenderse a cada uno de los d?as del a?o.
Adem?s, la armon?a de objetivos en la diacon?a para aliviar los sufrimientos del hombre, la b?squeda de la verdad del mensaje de Cristo, la conversi?n y la penitencia, son etapas obligadas a trav?s de las cuales cada cristiano digno de este nombre debe unirse al hermano para implorar el don de la unidad y de la comuni?n.
Os exhorto, por tanto, a pasar estos d?as en un clima de orante escucha del Esp?ritu de Dios para que se den pasos significativos en el camino de la comuni?n plena y perfecta entre todos los disc?pulos de Cristo. Que nos lo obtenga la Virgen Mar?a, a quien invocamos como Madre de la Iglesia y auxilio de todos los cristianos, apoyo en nuestro camino hacia Cristo.
[Traducci?n del original italiano realizada por Zenit. Al final de la audiencia, el Papa dirigi? un saludo en varios idiomas a los peregrinos. En espa?ol, dijo:]
Queridos hermanos y hermanas:
Ma?ana comienza la Semana de oraci?n por la unidad de los cristianos. Durante estos a?os, en los encuentros que he tenido con representantes de Iglesias y Comunidades eclesiales, y particularmente en la reciente visita al patriarca Ecum?nico Bartolom? I, en Turqu?a, he podido observar cuan grande es el deseo de unidad. Un camino largo y no f?cil, que todos debemos seguir recorriendo.
La unidad es un don de Dios y fruto de la acci?n de su Esp?ritu. Por ello es importante rezar. Cuanto m?s nos acercamos a Cristo convirti?ndonos a su amor, m?s nos acercamos tambi?n los unos a los otros.
Este a?o el tema b?blico propuesto para la oraci?n y reflexi?n es: ?Hace o?r a los sordos y hablar a los mudos?. Palabras del Evangelio de Marcos que, poniendo de relieve dos aspectos de la misi?n de toda comunidad cristiana: el anuncio del Evangelio y el testimonio de la caridad? subrayan tambi?n lo importante que es traducir el mensaje de Cristo en iniciativas concretas de solidaridad, que favorecen el camino de la unidad. Por ello la oraci?n por la unidad de los cristianos no puede limitarse s?lo a una semana, sino que debe extenderse a cada d?a del a?o.
Saludo cordialmente a los peregrinos de Espa?a y de Am?rica Latina, especialmente al grupo de la ?Scuola Italiana? de Montevideo. Os exhorto a vivir esta Semana en un clima de oraci?n y escucha del Esp?ritu de Dios, para avanzar d?a a d?a en el camino de la plena comuni?n entre todos los disc?pulos de Cristo.
[? Copyright 2007 - Libreria Editrice Vaticana]