CUARTO Domingo
"Reconcilia"div>
La liturgia de hoy nos ofrece una lecturas b?blicas que, en continuidad con los domingos anteriores, expresan el grito eterno de Dios: "Reconciliaos conmigo". "venid a Mi'. "volved a mi Casa que es vuestra casa". El Dios omnipotente, creador del cielo y de la tierra, autor de maravillas, infinito y eterno; se deshace en entra?as de misericordia que busca. espera, a?ora, anhela el reencuentro con cada uno de sus hijos. creados. criados y redimidos a costa de su Hijo Primog?nito. Y el Padre no nos pide que hagamos nada, no exige ninguna reparaci?n, no espera saldar las cuentas. El Padre s?lo sabe abrir los brazos, estrechar contra su pecho y obsequiar con mil gracias a cualquiera que se reconozca necesitado de Padre, que se acuerde de su Buen Padre Dios y que acuda a su Casa (a la Iglesia) para encontrarse con E apenas se haya acercado.
As? es Dios, puro Hogar, pura Familia, puro Amor. As? somos nosotros, indigentes, desar?raigados, desalmados. Pero en este encuentro entre desiguales se celebra el "banquete", la fiesta, el gozo, la "m?sica", el "baile" la Vida.