Las tinieblas
sobre la tierra Desde la hora sexta, hubo tinieblas sobre toda la tierra hasta la hora nona (Mt 27,45).
Y cuando fue la hora sexta, hubo tinieblas sobre toda la tierra hasta, la hora nona (Me 15,33).
Era ya alrededor de la hora sexta, cuando una tinieblas se hizo sobre toda la tierra hasta la hora nona, eclips?dose el sol;... (Le 23,44-45).
Estas tinieblas23 que cubrir?an la tierra, estaban profetizadas en los profetas: Suceder? aquel d?a -or?culo del Se?or Yahveh- que yo har? ponerse el sol a mediod?a y en plena luz del d?a cubrir? la tierra de tinieblas (Am 8,9).
Mir? a la tierra, y he aqu? que era un caos; a los cielos, y faltaba su luz (Jer 4,23).
D?a de ira el d?a aquel, d?a de angustia y de aprieto, d?a de tinieblas y de oscuridad, d?a de nublado y de densa niebla,... (Sof 1,15).
?Tiemblen todos los habitantes del pa?s, porque llega el D?a de Yahveh, porque est? cerca! ?D?a de tinieblas y de oscuridad, d?a de nublado y densa niebla! (Joel 2,1-2).
Esas tinieblas fueron misteriosas, no cabe duda, desde el momento en que no pueden atribuirse a fen?meno alguno natural. No pudieron ser consecuencia de un eclipse, porque era un plenilunio, en que la luna no puede interponerse entre el sol y nuestro planeta, ni a?n suponiendo lo imposible, o sea que tales tinieblas proviniesen de un eclipse causal, pudiera darse que cubrieran toda la tierra por espacio de tres horas.
En verdad que no han faltado en nuestros d?as quienes hayan tratado de explicar naturalmente ese fen?meno, bien que sin resultado. Hug24, entre otros, ha recordado que entre los signos precursores de los terremotos figura el de ciertos vapores muy densos, que al derramarse por la atm?sfera amortiguan considerablemente la luz del sol. S?lo que ni tales vapores pueden llegar a confundirse con la oscuridad de un eclipse, ni se prolongan por espacio de tres horas, ni se extienden por todo el universo.
Tenemos el testimonio de Or?genes que vivi? 180 a?os despu?s de la muerte de Cristo, podemos citar a San Cirilo de Alejandr?a, San Jer?nimo, San Agust?n, San Gregorio Nasianceno, San Hilario, y otros muchos.
Tertuliano se expresa de la siguiente manera en un libro titulado "Apolog?tico" enviado al Emperador y Senado Romano:
"Al momento de expirar Jesucristo, estando el sol en medio del cielo, se escondi? en las tinieblas del d?a. Pensaron que era eclipse los que no sab?an la profec?a, que en la muerte de Cristo hab?a de cesar el sol. Este desmayo general de la luz lo hallar?is en vuestros archivos, advertido por inaudito en la naturaleza"
25.
Por lo que podemos deducir que Tertuliano alude aqu? a los archivos del Imperio Romano.
23 El dia de Yahveh lleva consigo se?ales c?smicas: terremotos (cf. Am 8,8; Is 2,10; Jer 4,24) y eclipses de sol (cf. Am 8,9; Jer 4,23).