Jueves, 17 de mayo de 2007
Intervenci?n - Cardenal Jorge Mario Bergoglio s.j. V Conferencia del Episcopado Latinoamericano
Argentina, 15 de mayo de 2007


EXPECTATIVAS Y ESPERANZAS DE LA IGLESIA EN ARGENTINA FRENTE A LA V CONFERENCIA


Iniciado en el documento del Episcopado argentino mencionado al comienzo: ?L?neas pastorales para la nueva evangelizaci?n? del a?o 1990 y continuando en el documento ?Navega Mar adentro? nuestra Iglesia en Argentina se encuentra transitando un camino de conversi?n pastoral en clave evangelizadora que implica una din?mica profundamente eclesial, misionera e inculturada con el intento de llegar a los bautizados alejados y no bautizados. La dimensi?n misionera hoy no se concibe como una actividad al margen o paralela a las otras actividades pastorales, sino que est? en el coraz?n de su misma vitalidad evangelizadora.

Haciendo un apretado resumen desde la ?ptica del Documento de S?ntesis podemos decir: Los tres macrodesaf?os que se interpenetran rec?procamente, asumen de forma sint?tica los cambios epocales descriptos en la S?ntesis de Aportes recibidos (DSIN 49-79) y los cinco desaf?os que la Conferencia Episcopal Argentina expres? en ?Navega mar adentro? (NMA 21-48). El primero se refiere a la relaci?n de la persona y del pueblo de Dios en la Iglesia (religi?n); el segundo a la relaci?n de los hombres entre s? en la sociedad (justicia); el tercero afecta de forma transversal a las distintas comunidades sociales y los diversos ?rdenes de la cultura (comuni?n)



1. En el orden religioso: la ruptura en la trasmisi?n generacional de la fe cristiana en el pueblo cat?lico. Afirmamos la vigencia de la piedad popular cat?lica como forma viva de la inculturaci?n y la comunicaci?n de la fe, pero en la ?ltimas d?cadas notamos un cierta desidentificaci?n con la tradici?n cat?lica, la falta de su trasmisi?n a las nuevas generaciones y el ?xodo hacia otras comunidades (en los m?s pobres hacia el evangelismo pentecostal y algunas sectas nuevas) y experiencias (en las clases medias y altas hacia vivencias espirituales alternativas) ajenas al sentido de la Iglesia y su compromiso social. Algunas causas son la crisis del dialogo familiar, la influencia de los medios de comunicaci?n, el subjetivismo relativista, el consumismo del mercado, la falta de acompa?amiento pastoral a los m?s pobres y nuestra dificultad para recrear la adhesi?n m?stica de la fe en un escenario religioso plural: Se agrava el diagn?stico de Puebla: la fe y la religi?n popular est?n en una ?situaci?n de urgencia? sometidas a una ?crisis decisiva? (DP 460). Hay que generar un mayor fervor discipular y apost?lico que asuma nuestra sensibilidad religiosa y encuentre nuevos caminos para comunicar la fe.
2. En la dimensi?n social: Una inequidad escandalosa que lesiona la dignidad personal y la justicia social. Participamos en general de la situaci?n de Am?rica Latina. Entre los a?os 2002 y 2006 en Argentina crecieron al 8,7 % los ?ndices de medici?n de la indigencia; hay un 26,9 % en el nivel de la pobreza y estamos en la regi?n aparentemente m?s desigual de mundo, la que m?s creci? y menos redujo la miseria. Persiste la injusta distribuci?n de los bienes, lo cual configura una situaci?n de pecado social que clama al cielo y que excluye de las posibilidades de una vida m?s plena a muchos hermanos. Poderes pol?ticos y planes econ?micos de diversos signos no dan muestras de producir modificaciones significativas para ?eliminar las causas estructurales de las disfunciones de la econom?a mundial? (Bnedicto XVI, Discurso al Cuerpo Diplom?tico, 8/1/2207). En Argentina urge animar una conducta justa, coherente con la fe que promueva la dignidad humana, el bien com?n, la inclusi?n integral, la ciudadan?a plena y los derechos de los pobres.

3.En toda la cultura: La crisis de los v?nculos familiares y sociales fundantes de los pueblos. Hay una reserva de valores religiosos, ?ticos y culturales de nuestro pueblo pero el individualismo posmoderno y globalizado favorece un estilo de vida que debilita el desarrollo y la estabilidad de los v?nculos entre las personas que forman comunidades y las comunidades formadas por personas. Se notan en los conflictos de la familia, los desgarramientos de la Naci?n y la desintegraci?n del continente.

La acci?n pastoral debe mostrar que la relaci?n con nuestro Padre exige el desarrollo de la uni?n entre los hermanos. En esta l?nea el n?cleo del contenido evangelizador (NMA 50-51) busca fortalecer una mayor comuni?n con la Trinidad en el Esp?ritu de Cristo que sane, promueva y afiance los v?nculos personales en las nuevas expresiones de amor, amistad y comuni?n a nivel familiar, social y eclesial. Aqu? se sit?an tanto la necesidad de una intensa comuni?n eclesial ad intra que aliente la renovada pastoral org?nica diocesana y nacional, como la exigencia de un servicio ad extra para que la comuni?n de la Iglesia anime una mayor integraci?n latinoamericana.



Aparecida, mayo 2007.

Card. Jorge Mario Bergoglio s.j.
Publicado por verdenaranja @ 0:07  | Hablan los obispos
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