Jueves, 10 de diciembre de 2009

Reflexión de monseñor Rubén Oscar Frassia, obispo de Avellaneda-Lanús para el programa radial "Compartiendo el Evangelio". (AICA
(22 de noviembre de 2009)



Solemnidad de Cristo Rey 


Evangelio según San Juan 18, 33b-37 (Ciclo B)

Recordar:

El 25 de noviembre, en la parroquia Sagrado Corazón de Lanús con las reliquias del Santo Cura de Ars allí presente, voy a tener la dicha y la gracia -junto a mi presbiterio- de ordenar a dos nuevos sacerdotes: el padre Pablo Andrés Balario y el padre Rodolfo Gustavo Veliz.

Al día siguiente, el 26, los obispos de la Región Buenos Aires, es decir las once diócesis más los obispados que son del Rito Oriental, tendremos un encuentro sacerdotal en la Iglesia Catedral Metropolitana de la Arquidiócesis de Buenos  Aires.

A las 08 hs, estaremos con  la reliquia, el Corazón Sacerdotal del Santo Cura de Ars. A las 09 hs, dará una conferencia el Cardenal Emérito de Paraná Mons. Estanislao Karlic, y a las 10.30 hs, tendremos la Eucaristía presidida por el Cardenal Jorge Bergoglio concelebrada por los obispos y los sacerdotes presentes.

Pediremos a Dios, por medio del Santo Cura de Ars, por la santificación, la fidelidad y la perseverancia de nuestros pastores. Para que siga llamando a jóvenes de nuestras familias y que ellas sean generosas en ese llamado que Dios sigue haciendo y que a veces no se lo escucha debidamente.

Finalmente, el 27 regresan las sagradas reliquias a Francia, a Belley Ars. Agradecemos la bondad de esa diócesis, de esa Iglesia hermana que tanto nos ha servido regalándonos lo más precioso: el Corazón Sacerdotal de San Juan María Vianney. 

Evangelio: “¡Tú lo dices, Yo soy Rey!”

¡Esta clarísimo! ¡Jesucristo es Rey! Pero su reino no es de este mundo. Los criterios del Evangelio, los criterios del Señor, son superiores y distintos a los criterios mundanos. Esto no significa una separación, pero tampoco es una identificación, ¿por qué? Porque están las dos ciudades: la de la tierra -la ciudad de los hombres- y la ciudad de Dios, que es la que da sentido y forma a la ciudad de la tierra, a nuestra sociedad.

Él es Rey, pero su reino no es de este mundo.

¡Incide en este mundo!

¡Gravita en este mundo!

¡Da luz a este mundo!

¡Da sal a este mundo!

La presencia de Cristo ilumina, no impone pero sí propone. Su doctrina, su persona, su enseñanza, no impone pero propone. Uno tiene que ejercerla y recibirla en su libertad; aceptarla y dar frutos.

Veamos: Cristo Rey nos ha liberado ¿de qué? ¡De todo pecado! ¿Mediante qué? ¡Mediante su pasión y muerte! ¿Qué ha hecho de nosotros? ¡Al liberarnos por medio de su propia cruz, ha hecho de nosotros un reino de sacerdotes! ¡Nos ha participado! Y nosotros participamos de la misma realeza de Cristo; de los mismos criterios de Cristo; de la misma actitud de Cristo.

Por lo tanto, Cristo tiene que reinar en nuestro corazón, en nuestra vida, en nuestras actitudes, en nuestras conductas, en nuestros valores, en nuestra pertenencia, en nuestras vinculaciones para con los demás. ¡Todo tiene que ver, porque todo concluye en ÉL, en su Amor y en la Verdad!

Lo que está excluido es el demonio, el maligno y la mentira. El padre de la mentira es el demonio y allí no hay lugar para la verdad; y en la verdad no hay lugar para la mentira. Cristo se nos da. Aceptó la muerte por nosotros “para que tengamos vida y vida en abundancia”

Le pedimos al Señor que ¡reine en nuestra vida! y que nosotros vivamos libres en lo humano, en lo cristiano y en nuestra pertenencia. Sabemos cuáles son los criterios para acceder a esa libertad: cada uno tendrá la responsabilidad de escuchar, de responder, de asentir o disentir, de involucrarse, de comprometerse.

Y es justamente por eso que siempre deberemos ser “discípulos y misioneros de Jesucristo para que nuestros pueblos en Él tengan vida, y vida en abundancia”

Les dejo mi bendición, y que Cristo Rey reine en nuestra vida; en el Nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén 

Mons. Rubén Oscar Frassia, obispo de Avellaneda-Lanús


Publicado por verdenaranja @ 22:42  | Hablan los obispos
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