Exhortaci?n Pastoral de la CCXVII Comisi?n Permanente de la Conferencia Episcopal Espa?ola ante la pr?xima Visita de Benedicto XVI a Espa?a. Madrid, 30 de septiembre de 2010
??Bienvenido, Santo Padre!?
Se acercan ya las fechas en las que el Papa Benedicto XVI volver? a visitar Espa?a. En la ma?ana del 6 de noviembre llegar? a Santiago de Compostela, para salir ese mismo d?a por la tarde hacia Barcelona, desde donde regresar? a Roma al atardecer del d?a 7. Ser? una visita, con motivos bien precisos, a dos Iglesias diocesanas, cuyos obispos ya se han dirigido a sus fieles explic?ndoles la importancia de este acontecimiento providencial y exhort?ndolos a acoger al Sucesor de Pedro, de modo que su presencia y su palabra puedan dar frutos abundantes de vida cristiana.
Los obispos miembros de la Comisi?n Permanente de la Conferencia Episcopal nos unimos a nuestros hermanos de Santiago y de Barcelona para hacer extensivo el llamamiento a los fieles de toda la Iglesia que peregrina en Espa?a.? Todos hemos de aprovechar espiritualmente la visita del Santo Padre, al que damos ya desde ahora la m?s cordial bienvenida. Esperamos con fe y con ilusi?n su Visita. Sabemos bien que donde est? Pedro, all? est? la Iglesia cat?lica, con toda su belleza y su fuerza de salvaci?n divina. Santiago y Barcelona podr?n experimentarlo de manera m?s viva y directa. Pero todas las di?cesis de Espa?a? est?n llamadas a beneficiarse tambi?n del impulso de catolicidad que significar? la visita del Santo Padre. Muchos peregrinar?n a Santiago o a Barcelona. Otros podr?n ver y escuchar al Papa por los medios de comunicaci?n[01]. Todos podr?n unirse espiritualmente por medio de la oraci?n, ya desde ahora, a las intenciones del Santo Padre. Recordamos brevemente los motivos y los fines de su visita pastoral.
El 6 de noviembre, en pleno A?o Santo Compostelano, el Papa visitar? como peregrino Santiago de Compostela, donde se guarda el sepulcro y la memoria del ap?stol Santiago, el primero que derram? su sangre por amor a Cristo, despu?s de haber evangelizado nuestras tierras de Espa?a. Desde aqu? la fe cristiana se extender?a luego por Am?rica, en una de las mayores empresas evangelizadoras de la historia de la Iglesia. Antes, Santiago hab?a actuado como polo de atracci?n para innumerables peregrinos, a cuyo paso se hab?a ido forjando la unidad espiritual de Europa, de la que Benedicto XVI ha hablado de nuevo en su reciente viaje al Reino Unido. A Santiago, pues, el Papa llega como peregrino a uno de los lugares apost?licos m?s emblem?ticos de las ra?ces cristianas de Espa?a, de Europa y de Am?rica.
El 7 de noviembre, el Santo Padre consagrar? en Barcelona el templo expiatorio de la Sagrada Familia. El bell?simo espacio, concebido e iniciado por el genial arquitecto y siervo de Dios Antonio Gaud? (1852-1926), se halla ya en condiciones para acoger la celebraci?n del culto divino. All? se dan la mano la aut?ntica inspiraci?n art?stica y la verdadera devoci?n religiosa. La impresionante arquitectura es expresi?n de un amor divino; del amor, en concreto, a la familia de Nazaret, donde Jes?s, Mar?a y Jos? ponen ante los ojos del mundo el hondo significado de toda familia humana como cauce y expresi?n del amor de Dios por cada persona. A finales del siglo XIX, cuando se proyecta el templo, la Iglesia advert?a ya que la familia natural y cristiana, basada en el matrimonio, constituye una c?lula b?sica de la sociedad, a la que el Estado y la Iglesia han de prestar una atenci?n prioritaria, poni?ndose a su servicio, sin preterirla ni suplantarla.
Invitamos a todos a escuchar con atenci?n el mensaje del Papa y a acompa?arle con el cari?o, con la oraci?n y, si puede ser, con la participaci?n en las celebraciones que presidir? y en los recorridos que har? en Santiago y Barcelona.
Que la Virgen Sant?sima prepare los corazones y gu?e al Santo Padre en la visita que con tanta generosidad y sacrificio nos ha querido hacer. ?Bienvenido, Santo Padre!?
NOTA FINAL
1 Una p?gina oficial de la Visita ‐ www.visitadelpapa2010.org ‐ ofrecer? en directo todos los actos del Papa y los mantendr? archivados, a disposici?n de quienes no hayan podido verlos en su momento o de quienes deseen verlos de nuevo posteriormente.